El arrebatamiento de la Iglesia será un evento extraordinario como ningún otro en la historia de la humanidad. Imagínese las calles y los expresos a través del mundo. Imagínese el sinnúmero de accidentes de carros, los aviones que se estrellarán, las familias devastadas al descubrir que los infantes han desaparecidos y que familiares queridos ya no existen. Imagínese la desolación, el dolor, el sufrimiento, la confusión, etc.
Hoy día vemos un aumento en las películas de Hollywood con los temas de extraterrestres o marcianos tomando control del mundo y exterminando a la raza humana. Todo esto prepara la atmósfera para utilizar dichas actividades extraterrestres como respuesta a la crisis que el rapto dejará en este mundo. Todo esto preparará el escenario para la manifestación del Anticristo; él se presentará como la solución y la única persona cualificada para dirigir al mundo ante semejante crisis.
Aunque la palabra “Rapto” como tal, no se encuentra en la Biblia, es obvio que el evento histórico del momento en el cual nos encontremos con Cristo en las nubes, se puede describir apropiadamente, como un rapto o arrebatamiento.
Hoy día existe una doctrina falsa, como tantas otras, que ha venido en contra de la existencia venidera del rapto de la iglesia. Mas el rapto es una realidad Bíblica que representa buenas y extraordinarias noticias para el Cristiano. En Primera de Tesalonicenses 4:16-18 el Apóstol Pablo nos da una descripción clara de este evento:
“16 El Señor mismo, con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, descenderá del cielo. Entonces, los muertos en Cristo resucitarán primero. 17 Luego nosotros, los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor. 18 Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras.” (RVR 1995)
Los que murieron siendo cristianos resucitarán primero para encontrarse con el Señor en las nubes. Luego, de forma casi instantánea, los cristianos que estén vivos, al momento del rapto, también se encontrarán con Cristo en las nubes. Debemos destacar que esta no es la segunda venida de Cristo. De la segunda venida hablaremos luego en nuestro estudio. El rapto será en un instante; en términos de la duración del rapto en si, sucederá en menos de un segundo. La Biblia nos dice en Primera de Corintios 15:51-52
“Os digo un misterio: No todos moriremos; pero todos seremos transformados, 52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta, porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles y nosotros seremos transformados…” (RVR 1995)
¿Estás preparado para el rapto? El rapto es solo y exclusivamente para los Cristianos y solo existe una forma de ser Cristiano. Nosotros somos pecadores por naturaleza. Es ese pecado el que nos separa de Dios. Nosotros no tenemos la habilidad de deshacernos de nuestro pecado, por lo que fue necesario que Cristo muriera por nosotros. Solo a través de Jesucristo somos salvos del infierno.
El ser simplemente Católico no te preparará para el rapto, el ser simplemente Pentecostal no te llevará al cielo tampoco, el ser considerada una buena persona, el ir a la Iglesia y aún el servir en ministerios ayudando a otros, tampoco te dará vida eterna con Dios…Jesús el Cristo y sólo a través de Él alcanzarás el ser parte del rapto, de las Bodas del Cordero, del Milenio y de hacer residencia en la Nueva Jerusalén.
La Biblia nos dice en Romanos 3:23 que todos hemos pecados. En Juan capítulo tres Jesús establece en su conversación con el Fariseo Nicodemo que para ver el reino de Dios es necesario nacer de nuevo. Finalmente, en Romanos 10:9-10 la Biblia nos dice como nacer de nuevo. Estos versos son solo algunos ejemplos de lo que representa las buenas noticias del Evangelio de Cristo. Tenemos que arrepentirnos de nuestros pecados y recibir a Cristo en nuestros corazones, no tan solo como Salvador, mas también como Señor.
El “Huffington Post” reportó que el nuevo Papa Francisco estableció que aún los ateos pueden ser redimidos si hacen el bien. El Evangelio de este Papa es uno el cual establece que no hay necesidad de Cristo para adquirir la salvación, que nosotros mismos, si nos enfocamos en ser buenos, podemos ser redimidos. Este tipo de atrocidad doctrinal se viene divulgando desde hace muchos años. El creer en semejante falsa enseñanza no te preparará para el rapto.
“Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por mí.” (RVR 1995)
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