“Considera Estos Principios Bíblicos Antes de Casarte”

Como parte de las ceremonias de Boda, en un momento dado, se hace una invitación abierta en caso de que haya alguien que se oponga a dicha unión. Generalmente el ministro dice; “Si hay alguien que se oponga a este matrimonio, que hable ahora o que calle para siempre.” Nunca he sido testigo de nadie que se oponga abiertamente a ninguna boda; pero estoy seguro de que muchos hubiesen deseado, después del matrimonio y de pasar por la pesadilla de este, de que alguien se hubiese opuesto al mismo.

En mis cincuenta y tres años de vida, el error más grande, doloroso y costoso de mi vida fue el casarme con la persona incorrecta después de la muerte de mi primera esposa. Ese matrimonio fue horrendo y terminó en divorcio. Pude haber evitado ese obscuro camino si hubiese prestado atención a Segunda de Corintios 6:14-18. Mas creemos que podemos cambiar a nuestras parejas después del matrimonio; ignoramos lo establecido por Dios y de alguna forma nos convencemos de que tenemos mejores planes que El. Para ser franco, el deseo y la atracción sexual nos distorsiona los pensamientos y afectan negativamente la toma de decisiones.

Luego de mi divorcio hubo unos cuantos hombres y mujeres de Dios que me dijeron abiertamente que ellos sabían que ese matrimonio no iba a funcionar. Fueron profetas no antes del fracaso, pero lamentablemente, como muchos, profetas luego de que el fracaso sucedió. Hoy quiero ser el que hable antes de tu boda, no necesariamente para detener tus planes, pero para que consideres lo que Dios tiene que decir al respecto. La Biblia tiene mucho que decir sobre el matrimonio, específicamente con quien no casarse. Segunda de Corintios 6:14-18 nos dice, 

No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas?

¹⁵ ¿Y qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo?

¹⁶ ¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo:
    Habitaré y andaré entre ellos,
    Y seré su Dios,
    Y ellos serán mi pueblo. 

¹⁷ Por lo cual,
    Salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor,
    Y no toquéis lo inmundo;
    Y yo os recibiré,

¹⁸ Y seré para vosotros por Padre,
Y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso. (RVR 1960)

Las Escrituras son muy claras, si eres un hombre de Dios no te cases con una mujer incrédula y, si eres una mujer de Dios no te cases con un hombre incrédulo. La Palabra incrédulo es la Palabra Griega, ápistos; que significa, “Infiel; alguien que no cree en el evangelio de Cristo.”^[1]

Hermanos, Pablo lo hace claro de que no hay compañerismo en común; el creyente anhelará estar con la familia de Cristo, mientras que el no creyente rechazará dicha comunión. Habrá argumentos entre lo que es justo e injusto para el incrédulo y para el creyente. Uno encontrará la verdad en la Palabra de Dios, mientras que el otro en sus propias opiniones, su cultura, la forma que fue criado, etc. Esto va a ser una pesadilla de matrimonio que Pablo está tratando de evitar.

Imagínate que ejemplo le vas a dar a tus hijos; la confusión tan grande que van a sentir al ver a uno de los padres seguir a Dios mientras que el otro no. La persona no creyente es inmunda delante de Dios, por eso Dios nos dice, “…Salid de en medio de ellos, y apartaos… Y no toquéis lo inmundo” 2 Corintios 6:17 (RVR 1960). 

Hermano o hermana que consideras casarte; te lo suplico… considera las Palabras del Apóstol Pablo. El analizar estos versos bíblicos te darán repuestas concerniente a tus planes de matrimonio. Sabrás si es o no es de Dios. Si esto no es de Dios definitivamente que te dolerá el romper con esta relación y el cancelar la boda, pero aún más te dolerá cuando sufras las consecuencias de la desobediencia a lo establecido por Dios.

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^[1] Spiros Zodhiates, The Complete Word Study Dictionary: New Testament (Chattanooga, TN: AMG Publishers, 2000).