
Característica Número 4
“El discípulo de Cristo pone a Dios por encima de su propia familia”
Muchos sacrifican sus familias por trabajos y por riquezas. Sacrifican tiempo con sus esposas e hijos y dan como excusa la importancia de sus trabajos. Al final se dan cuenta de que no valió la pena. La razón por la cual no vale la pena es porque es una violación al orden de prioridades divino. Verdaderamente que después de Dios, en sucesión de importancia, es la familia.
Para entender estos puntos miremos la vida de Abraham. Dios sabia que Abraham era un hombre de familia y por eso lo llamó a ser el padre de la nación de Israel. En Génesis 18:17-19 vemos que,
Entonces el SEÑOR dijo: —¿He de encubrir a Abraham lo que voy a hacer, 18 habiendo de ser Abraham una nación grande y poderosa, y que en él han de ser benditas todas las naciones de la tierra? 19 Porque yo lo he escogido y sé que mandará a sus hijos y a su casa después de él que guarden el camino del SEÑOR, practicando la justicia y el derecho, para que el SEÑOR haga venir sobre Abraham lo que ha hablado acerca de él. (RVA2015)
El poner a Dios por encima de la familia no significa que literalmente estamos llamados a aborrecer a nuestras padres, hijos y hermanos. Sabemos que al centro de nuestra fe está el amar, aún hasta nuestros enemigos. Mas nuestro amor por Dios, en comparación con el amor por nuestros seres queridos, demanda ser incalculablemente mayor.
Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y hermanos, y hermanas, y aun también su propia vida, no puede ser mi discípulo. Lucas 14:26 (RVR1960)
Dios es primero, estamos llamados a amarlo a El por sobre todas las cosas. Este verso nos da una idea de cuan grande nuestro amor por Dios debe ser en comparación con nuestros seres queridos. Sin duda que la familia es importantísima para Dios, mas nunca se utiliza la familia como excusa para no hacer lo que Dios nos ha mandado. Por encima de la esposa y de los hijos, padres y madres tenemos que ser obedientes a Dios. Con Abraham entendemos dicho nivel de obediencia,
Aconteció después de estas cosas, que probó Dios a Abraham, y le dijo: Abraham. Y él respondió: Heme aquí. 2 Y dijo: Toma ahora tu hijo, tu único, Isaac, a quien amas, y vete a tierra de Moriah, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno de los montes que yo te diré. 3 Y Abraham se levantó muy de mañana, y enalbardó su asno, y tomó consigo dos siervos suyos, y a Isaac su hijo; y cortó leña para el holocausto, y se levantó, y fue al lugar que Dios le dijo. 4 Al tercer día alzó Abraham sus ojos, y vio el lugar de lejos.5 Entonces dijo Abraham a sus siervos: Esperad aquí con el asno, y yo y el muchacho iremos hasta allí y adoraremos, y volveremos a vosotros. 6 Y tomó Abraham la leña del holocausto, y la puso sobre Isaac su hijo, y él tomó en su mano el fuego y el cuchillo; y fueron ambos juntos. 7 Entonces habló Isaac a Abraham su padre, y dijo: Padre mío. Y él respondió: Heme aquí, mi hijo. Y él dijo: He aquí el fuego y la leña; mas ¿dónde está el cordero para el holocausto? 8 Y respondió Abraham: Dios se proveerá de cordero para el holocausto, hijo mío. E iban juntos. 9 Y cuando llegaron al lugar que Dios le había dicho, edificó allí Abraham un altar, y compuso la leña, y ató a Isaac su hijo, y lo puso en el altar sobre la leña. 10 Y extendió Abraham su mano y tomó el cuchillo para degollar a su hijo. 11 Entonces el ángel de Jehová le dio voces desde el cielo, y dijo: Abraham, Abraham. Y él respondió: Heme aquí. 12 Y dijo: No extiendas tu mano sobre el muchacho, ni le hagas nada; porque ya conozco que temes a Dios, por cuanto no me rehusaste tu hijo, tu único. 13 Entonces alzó Abraham sus ojos y miró, y he aquí a sus espaldas un carnero trabado en un zarzal por sus cuernos; y fue Abraham y tomó el carnero, y lo ofreció en holocausto en lugar de su hijo. Génesis 22:1-13 (RVR1960)
Quizás digas en tu mente, -pero pastor, estos son casos extremos- quiero que consideres la fe, obediencia y amor a Dios de Abraham la próxima vez que canceles tus compromisos con Dios.
Continúa…