Característica Número 7
“El discípulo de Cristo pone todo lo que tiene a disposición del Reino de Dios”
Así, pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee, no puede ser mi discípulo. Lucas 14:33 (RVR1960)
En Mateo 26:7-13 vemos a una mujer derramar un vaso de alabastro con un perfume muy caro sobre la cabeza de Cristo. Se dice que este perfume era el equivalente a un año de salario en esos tiempos. En Lucas 19 vemos a Cristo preparándose para su entrada triunfal en Israel. Les dijo a sus discípulos que le buscaran un asno que jamás haya sido montado y si preguntan que simplemente contestaran que el Señor lo necesita. Cuando los dueños del asno preguntaron, los discípulos le dieron la respuesta que Cristo le dijo que dieran; fue todo lo que necesitaron decir. Los dueños del asno estuvieron dispuestos a dar lo que tenían sin preguntas. En Mateo 26 Jesús escoge el aposento alto de cierto hombre para celebrar la última cena. Nunca se menciona el nombre de este hombre, pero su disponibilidad fue evidente. En el caso de los discípulos originales ellos lo dieron todo. En la Iglesia primitiva también lo daban todo y lo ponían a la disponibilidad de la Iglesia. Hechos 4:32-37 nos describe este fenómeno,
La multitud de los que habían creído era de un solo corazón y una sola alma. Ninguno decía ser suyo propio nada de lo que poseía, sino que todas las cosas les eran comunes. 33 Con gran poder los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús, y abundante gracia había sobre todos ellos. 34 No había, pues, ningún necesitado entre ellos, porque todos los que eran propietarios de terrenos o casas los vendían, traían el precio de lo vendido 35 y lo ponían a los pies de los apóstoles. Y era repartido a cada uno según tenía necesidad. 36 Entonces José, quien por los apóstoles era llamado Bernabé (que significa hijo de consolación) y quien era levita, natural de Chipre, 37 como tenía un campo, lo vendió, trajo el dinero y lo puso a los pies de los apóstoles. (RVA2015)
¿Cómo podemos entender este grado de confianza en la Iglesia? ¿Cómo entender este grado de unidad y de compromiso con la Iglesia? Hermanos, es imposible entender la Iglesia descrita en Hechos si la vemos a través de los ojos de la Iglesia institucionalizada de hoy día.
La Iglesia de Hechos no estaba compuesta de miembros; la Iglesia de Hecho era una familia. La Iglesia de Hechos no se reunía en edificios costosos en donde la mayoría de su presupuesto se perdía, se reunían en sus casas. Los edificios no eran necesarios porque eran familia. Nosotros no necesitamos edificios especiales para reunirnos con nuestros hijos, nuestros, padres, familiares y amigos ya que son parte de nuestras vidas. Desde ese contexto familiar es más fácil entender la unidad y el compromiso que esta iglesia tenia el uno con el otro.
“Oh, Señor Padre, cuanto nos hemos alejado de tu estructura y cuanto hemos contaminado la Iglesia con estructuras de hombre. No tenemos nada en común, cada uno por su lado, cada uno con lo suyo. Ayúdanos Padre; ayúdanos Espíritu Santo… En el nombre de Jesús… Amen.”
Continúa…