
Le doy gracias a Dios por mi padre, Luis Ángel Casiano Mercado. Mi padre ha sido de gran bendición para mi. Me ensenó seriedad y respeto. Sin mi padre yo hubiese o, caído preso o, ya estuviese muerto. Tuve un padre que me puso vergüenza. El no fue perfecto, cometió sus errores, como también nosotros hemos cometido los nuestros. Mas el respeto y, se puede decir que hasta cierto punto miedo, que le tenía a mi padre me ayudó a no cometer aún más locuras en mi juventud. Tener un padre que te ame, se interese por ti, te cuide y te discipline… es una verdadera bendición. Proverbios 1:8-9 nos dice,
Escucha, hijo mío, la disciplina
de tu padre
y no abandones la instrucción
de tu madre;
9 porque diadema de gracia serán
a tu cabeza
y collares a tu cuello.
(Reina Velera Actualizada 2015)
La palabra Padre en el hebreo es la palabra ʾāḇ, que significa “Cabeza del hogar, predecesor o progenitor, patrón; quiere decir que es una persona que emplea o que sustenta la casa financieramente. Tiene como característica ser benevolente, mas también es uno digno de respecto y de honor. La palabra se utiliza para padres biológicos y también espirituales.”[1] ʾāḇ es de donde procede la palabra “Abba”, la cual se puede traducir como “Papi”.
Fíjense que en el centro de la responsabilidad del padre está la disciplina. La disciplina no se limita al castigo, aunque también incluye castigo, mas también incluye instrucción. La madre, también tiene su responsabilidad; la palabra instrucción aquí es la palabra hebrea tōrāh: “El enfoque de la madre está en enseñarle la Palabra a los hijos”.[2] Ella trabaja como compañera idónea del marido. El marido también está enseñando, pero al padre se le añade la responsabilidad de disciplinar. Proverbios 13:1 nos dice
El hijo sabio acepta la disciplina de su padre,
pero el burlador no escucha
la corrección. (RVA2015)
Mas adelante en Proverbios 13:24 leemos, “El que detiene el castigo aborrece a su hijo, pero el que lo ama se esmera en corregirlo.” (RVA2015) La palabra “Corregirlo” es la misma palabra hebrea mûsār que se utiliza para disciplina. En otras palabras, cuando el padre no disciplina a sus hijos les está manifestando odio y no amor. La disciplina es una manifestación de amor. Hebreos 12:6-7 nos dice, “Porque el Señor al que ama, disciplina,
Y azota a todo el que recibe por hijo.7 Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina?” (Reina Valera 1960)
La disciplina es una bendición que se supone se manifieste a través del padre. Una de las tragedias más grande de nuestra sociedad es la ausencia de padres. Es una de las razones por las cuales tenemos tanta juventud perdida. Las estadísticas muestran las consecuencias devastadoras de la ausencia de padres en pobreza, criminalidad, educación, etc.[3]
Si tuviste un padre que te puso vergüenza… dale gloria a Dios. Quizás te metió fuete un poco más fuerte de la cuenta en ocasiones, pero créeme cuando te digo, si tienes vergüenza hoy es por que tu padre o alguna figura paterna se encargó de ponértela. Hoy día muchas madres han tenido que ser madres y padres; hay algunas que han hecho un trabajo excepcional; pero Dios va a levantar a los padres y va a cambiar esas estadísticas devastadoras en el Cuerpo de Cristo. El Viejo Testamento termina con estas palabras,
He aquí yo envío al profeta Elías antes de que venga el día del SEÑOR, grande y temible. 6 Él hará volver el corazón de los padres a los hijos, y el corazón de los hijos a los padres; no sea que venga yo y golpee la tierra con destrucción. Malaquías 4:5-6 (RVA2015)
Hay dos relaciones en esta tierra que son el centro del ataque de Satanás: 1) La relación entre esposa y esposo y, 2) la relación de hijos e hijas con sus padres. La promesa final del Viejo Testamento es que Dios va a volver el corazón de los padres hacia sus hijos. El trabajo comienza con los padres; muchos de ellos irresponsables que abandonaron a la mujer y la dejaron sola para criar a sus hijos… Dios va a arreglar eso primero. Luego va a trabajar con los hijos para que perdonen a sus padres y dejen las rebeldías. Pero una vez mas digo, si tuviste o tienes un padre en tu vida que te enseña los caminos de Dios y te disciplina, disfrutaste y, aún disfrutas, de un extraordinario privilegio.
[1] Warren Baker and Eugene E. Carpenter, The Complete Word Study Dictionary: Old Testament(Chattanooga, TN: AMG Publishers, 2003), 1.
[2] Warren Baker and Eugene E. Carpenter, The Complete Word Study Dictionary: Old Testament(Chattanooga, TN: AMG Publishers, 2003), 1220.
[3] http://www.fathersforgood.org/ffg/es/fathers_essential/index.html
Leave a Reply